El gozo y el regocije están disponibles, así como lo está la miseria. La rectitud y la paz están disponibles, así como el tormento y la confusión. Hay bendiciones y maldiciones disponibles, y por eso Deuteronomio 30:19 nos dice que escojamos la vida y las bendiciones.
“Lo que hemos visto y oído, se lo anunciamos también a ustedes”. (1Jn 1,3)
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